Escrito por: Mariel Hernández Maldonado
En las escuelas es común encontrarse con la típica dinámica en la que un niño es el molestón que va por los salones aterrorizando a los más pequeños o débiles, sin embargo en los últimos años la tendencia se ha multiplicado e intensificado, pasando de ser bromas “inocentes” a ser actos que tienden más al vandalismo. El bullying si bien se puede decir que es una práctica de siempre, a últimas fechas preocupa mucho a los papás.
Hay muchas maneras de prevenir que el bullying llegue a la última de las consecuencias y si bien una de ellas es educar a nuestros hijos desde casa, no todos los padres piensan igual, así que tenemos que idear otras formas de ayudarles a nuestros hijos a sobrellevar el peso en el caso de ser victimas de bullying, a continuación les ofrecemos algunos tips en caso de que nuestro hijo esté pasando por esta difícil situación:
- Mantener la compostura
Querido lector, es cierto que es como una daga cuando uno ve o se entera de que alguien está maltratando a nuestro hijo, sin embargo cuando él o ella deciden contarnos ya se encuentran lo suficientemente alterados y ver que no podemos contener nuestras sensaciones puede espantarlos y preferir no platicar.
- Investigar
Es necesario saber exactamente qué es lo que está pasando en la escuela, intentar rastrear la situación con otras madres y padres de familia, con amigos y familiares con los que nuestro hijo podría estar hablando de lo que pasa en las aulas.
- Platicar amplia y tranquilamente
Si nuestro hijo siente que puede confiar en nosotros, vamos a poder escuchar de manera más detallada lo que le preocupa en la escuela y en la vida diaria, de esta manera podemos conocerlo más ampliamente y ayudarle a resolver sus problemas.
- No interrumpir
Es cierto que cuando nos van contando las maneras en las que lo molestan, dan ganas de preguntarle muchas cosas, pero es importante tener paciencia y mostrar mucho interés y comprensión.
- Compromiso
Hacer el compromiso firme de ayudar a nuestro hijo a resolver el problema es algo que lo ayudará a sentir reconfortado, que le hagamos saber que no es el culpable y que no tiene por qué estar pasando por esa terrible situación.
- Contactar a los responsables
Hablar a la escuela y con los maestros encargados del grupo es una parte importante de ayudar a nuestro hijo, pues muchas veces los maestros no se enteran de los abusos ya sea porque pasan en la hora del descanso o cuando el maestro ya ha dejado el salón de clases.
Si con nuestra mirada paternal nos damos cuenta de que nuestro hijo se encuentra muy dañado por lo que le sucede en la escuela, es buena idea llevarlo con un profesional que trabaje con él y le ayude a superar los obstáculos emocionales, pues muchas veces el bullying que se deja sin resolver les provoca mermas en el desarrollo intelectual a las víctimas.
