Como padres una de las cosas que más deseamos es que a nuestros hijos les guste leer y se convierta en un hábito para ellos ya que les será de gran utilidad durante el resto de su vida. Pero en este afán por querer que sean lectores podemos cometer errores que ocasionen todo lo contrario.
Es por ello que a continuación te presentamos cinco maneras para fomentar la lectura en los niños. Además de los consejos que te daremos a continuación es importante que tomes en cuenta las planeaciones para primaria que establece la escuela para asegurarte de alinear tus estrategias con las de ellos, sólo asegúrate de tener la planeación correcta porque éstas cambian con base en el año que curse tu hijo, no son lo mismo las planeaciones de quinto grado que las de primer grado.
1.- Predicar con el ejemplo: los niños tienen una admiración natural por lo que hacen sus padres y buscan copiar sus actividades para parecerse a ellos, así que si el niño crece viendo a su mamá y papá leer le parecerá una actividad normal que él también va a querer hacer.
2.- Hacer de la lectura una rutina: si tu hijo aún es pequeño y le cuesta trabajo leer lo más recomendable es que tú les leas historias que los capturen y los emocionen. Se recomienda hacerlo antes de dormir como parte de la rutina.
3.-Ayúdales a leer: es probable que mientras tu hijo comienza a aprender a leer tenga dificultades para hacerlo y en la escuela te pidan que practiques con él, si es el caso lo recomendable es hacer esta actividad divertida y no como un castigo porque no lo sabe hacer. Inicia con sesiones de no más de 10 minutos y anímalo a que lean juntos. Cuando cometa un error corrígelo pero explícale cuál fue la equivocación y no lo culpes por no hacerlo bien.
4.-Respeta sus gustos: es probable que quieras que tu hijo lea cuentos tradicionales o novelas infantiles clásicas pero recuerda que tus gustos no son necesariamente los de él, así que no te enfoques en exigirle que lea algo muy refinado, dale la oportunidad de leer lo que él quiera para que lo haga con gusto y si en algún momento ya no quiere terminar el libro permítele que abandone la lectura, no sin antes pedirle que te explique cuál es el motivo por el que no quiere terminar ese libro.
5.-Llávalos a librerías: es bueno que se familiaricen con las librerías como un lugar divertido donde ellos tienen la oportunidad de elegir lo que les gusta, además ver a otros niños relacionándose con los libros puede motivarlos aún más.