Definitivamente uno de los aparatos más usados en las fábricas y bodegas, son los montacargas, teniendo mayor auge los montacargas toyota, sin duda son una buna mano para las labores pesadas que uno o varios hombres no podrían llevar a cabo, hoy por hoy, las empresas escogen los montacargas Toyota por su resistencia y fácil manejabilidad, siempre es bueno tener a la mano un buen montacargas manejado por un empleado capacitado para realizar esta labor.
Desdichadamente en Ecuador esto no fue lo que sucedió. En un edificio de la provincia de Guayaquil, después de varios días de haber desaparecido, se encontró el cadáver de una niña de 7 años debajo de un montacargas que se utilizaba como elevador del lugar. La niña, conocida como Yadira Núñez, había desaparecido de los ojos de su abuela Teresa Navarro, quien fue la primera en llegar al lugar de los hechos, en donde le dieron la noticia de que su nieta de siete años llevaba desde el 24 de julio muerta debajo de esta pesada máquina sin pasar por las sospechas de nadie alrededor.
La madre de la niña no pudo estar presente en el momento ya que ella se encuentra viviendo ilegalmente en Estados Unidos, a pesar de lo que desde allá había pedido a su madre que pegara anuncios con la foto de la pequeña Yadira para intentar conocer su paradero, sin imaginar en dónde la encontrarían. Por ser un mercado el lugar en donde encontraron a la niña, se acordonó la zona y llegaron integrantes del palacio municipal para dar fe de los hechos y empezar una posible investigación de cómo sucedieron los hechos, ya que hasta hoy se desconoce cómo pudo haber sucedido.
Una de las tías declaraba para la prensa local su incredulidad ante los hechos, ya que asegura haber estado parada en la plataforma del montacargas para buscarla y no vio ni escuchó nada, cosa que le pareció muy extraña.
Las primeras investigaciones arrojan que esto fue un accidente, mientras la familia intentaba reconocer el cuerpo destrozado de la niña, las autoridades indagaban sobre la naturaleza del accidente, más, el tío de la niña aseguró que los policías no les permitieron regresar a buscar ya que decían que el lugar ya había sido revisado por la policía. El hedor del cuerpo en descomposición había empezado a levantar sospechas entre los comerciantes, quienes intentaban mitigarlo con incienso y romero.
