La enuresis, enuresis nocturna o incontinencia infantil es la emisión incontrolada e involuntaria de pipí que suele darse más frecuentemente durante el sueño. la enuresis es un problema que afecta a un 20% de niños de más de 5 años de edad, sin embargo este padecimiento tiene solución.
Enuresis ¿Cuándo y cómo se da el control de los esfínteres?
El control de los esfínteres requiere el desarrollo y maduración del Sistema Nervioso Central. El primer momento del control de esfínteres se da alrededor de los 15 a 18 meses de edad, cuando el niño percibe la sensación de orinarse encima y puede comunicarlo a sus padres; a partir de los 18 meses el pequeño puede anticipar la sensación de pipí o la presión en la vejiga y puede decirle a sus padres que desea ir al baño, en este momento hay que estar pendiente para acompañarle al baño a que orine lo más pronto posible pues, aunque tenga la sensación de orinar no puede controlarla mucho tiempo. En torno a los 2 y 2 años y medio el niño inicia el control y puede acudir solo al baño o acompañado por sus padres. El control de los esfínteres se da primero de día y tarda más para controlarse de noche, generalmente alrededor de los 3 o 4 años de edad se logra el control completo de los esfínteres.
Si después de los 4 años de edad el niño sigue sin controlar sus esfínteres y se hace pipí de forma involuntaria se dice que tiene enuresis del tipo primario. Sin embargo, como el control de los esfínteres requiere de un aprendizaje por parte del pequeño que puede demorarse un poco, el diagnóstico de enuresis debe darse hasta después de los 5 años.
Causas de la enuresis
Algunos posibles causantes de la enuresis son:
- Retraso en el aprendizaje para mantener la orina, este factor se considera hasta los 5 años de edad.
- Vejiga pequeña, estos niños suelen tener micciones frecuentes durante el día.
- Entrenamiento inconstante o inadecuado en el uso del baño, esto se da cuando se inicia demasiado pronto o demasiado tarde.
- Sueño muy profundo, en niños que duermen muy profundamente a veces no perciben el “aviso” de tener que ir al baño.
- Factores neurológicos, fisiológicos o genéticos. Se dice que el 85% de los casos de enuresis son genéticos debido a un gen en el cromosoma 13, donde va codificada la información que determina la presencia de este problema, aunque pueden estar involucrados otros genes y cromosomas.
- Circunstancias críticas para el niño a nivel emocional: estrés familiar, nacimiento de un nuevo hermanito, la entrada o cambio de colegio, etc.
Se dice que el 90% de los casos de enuresis so causados por factores fisiológicos como el desarrollo de la vejiga o un retardo en la maduración o por una producción de orina superior a la normal durante la noche. El 10% restante se adjudica a acontecimientos emocionales en la vida del niño.
Es indispensable acudir con el pediatra para descartar otras patologías y adoptar las medidas necesarias para erradicar la enuresis, ya sea medidas conductuales, farmacológicas o emocionales. Sin embargo muchos papás no buscan solución al problema por vergüenza de reconocerlo públicamente o porque piensan que su pequeño podrá controlar sus esfínteres solo.
Para considerar que un niño tiene enuresis deben registrarse dos o más episodios al mes.
La cantidad de orina producida durante el día es del un 70% y el 30% restante corresponde a la noche para evitar tener que levantarse durante el sueño, la responsable de esto es la hormona ADH (anti diurética) que se sintetiza en el cerebro y es responsable de reducir la cantidad de orina que fabrican los riñones al retener parte del agua que se elimina con la orina. Los niveles de esta hormona son constantes durante el día y aumentan por las noches para reducir la producción de orina, cosa que no sucede en los casos de enuresis. De este modo la vejiga permanece llena por las noches y se produce la micción nocturna involuntaria e incontrolable durante el sueño, muchos niños se hacen pipí varias veces durante la noche.